Neta deténganse, Noés modernos. Sé que les mama, LES MAMA publicar en todas sus redes sociales que salvaron y ayudaron a un perrito. Y seamos honestos, no es tanto por el perrito sino por los comentarios de "Ay qué buena persona eres", "Ay, gracias por salvar al mundo", "Ay, ojalá me adoptaras a mí". En serio. Deténganse 5 minutos y piensen cuántos dueños están vueltos locos porque algún imbécil con iniciativa y necesidad de atención les robó al perro.
Tomemos este ejemplo de una "experta rescatista" que ha estado circulando en Facebook.
Cooker, lol.
Ella pone que obviamente "era de casa" y que ya en un rato verá qué hace y busca adoptantes. Dato: no sabía que la palabra "adoptantes" existía. Gracias por eso. Pero volviendo, básicamente está aceptando que subió a una perra claramente de casa y en vez de estar pidiendo que se contacten o busquen a los dueños, la está dando en adopción. ¿Qué vergas? No tienes que "ver qué haces" tienes que buscar a los putos dueños, carajo.
Contemplen la siguiente situación:
Van al súper con su hijo. Él opta por irse a dar una vuelta al divertidísimo pasillo de los cereales mientras ustedes compran esas aburridas verduras. Alguien lo ve solito en el pasillo y piensa "Hhhmmm, ese niño claramente es de casa pero está solo, ¡ya sé! Me lo voy a llevar y lo voy a dar en adopción". Eventualmente, ya secuestrado tu hijo, la persona sube una foto no diciendo que lo encontraron perdido y que extraña a su mamá, sino buscándole un nuevo hogar y una nueva madre porque la anterior era un monstruo que lo dejaba solo 5 minutos viendo cajas de Choco Krispis.
Hay una línea muy fina entre rescatar y robar a un perro. Neta háganlo con cuidado y asegúrense que el perro necesite ser rescatado. Buscar a su dueño volteando a la derecha y a la izquierda como si fueran a cruzar la calle mientras están metiendo el perro al coche no cuenta.
A veces me gustaría que Liam Neeson fuera real para que los buscara y les diera en toda su madre por andarse robando perros.
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