donde toda mi estupidez y mis patologías cobran vida.

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04 noviembre 2009

Miedo sin género.

Lady Gaga empezó a levantarme este tipo de dudas…bueno, en realidad no fue ella sino el trasvesti que me juró ser mujer hace unos años. Se los juro que hice todas las pruebas, busqué la manzana de Adán, no me supo explicar el fuera de lugar y le pedí por favor que se quitara sus panties para buscar el paquete. Entonces ya todo emocionadote pagué una módica cantidad, que pude haber gastado en putas de verdad, para que me dijera “te pido que no me des sexo oral y sólo acepto penetración anal” A lo que yo dije, qué demonios, es Noche Buena y tengo que divertirme de alguna forma.

Al otro día, una vez que se me bajó un poco el viaje de Meth, pude ver lo que hice mal. Sí busqué su manzana de Adán, pero nunca le pedí que se quitara la bufanda…¿o era corbata? Bueno, no se la quitó y dije “ole, no Adán para mí” y seguí. El fuera de lugar no me lo supo explicar porque la palabra “Offside” no desliza muy bien por mis labios mientras estoy vomitando, así que aunque yo gritaba y gritaba “¡Offside!” “¡Oooooooofffffffffsiiiiiiideeeeeeee!” y levantaba la bandera y todo, él..lla se encogía de hombros con cara de no te entiendo nada maldito degenerado. 2 de 2.
Pero está bien, errores que se entienden, que le pueden pasar a cualquiera y no pasa nada; pero el paquete señoras y señores, el puto paquete, ¿cómo putas le hago para no darme cuenta que ese mujerón de 1.92 con tatuajes de marinero y corte de pelo de Sinead O’Connor tenía una sorpresa llamada pene, testículo y escroto para mí? Muy fácil, se levantó la falda y me lo mostró todo… mientras estaba sentadoa cruzadoa de piernas haciendo la famosísima man-gina y me gritaba “¡Todo pagado! ¡Todo pagado! ¡Todo pagado!” para distraerme. Como dije, cualquiera pudo haber sido presa de tal equivocación.

Pero saben algo, no estoy enojado por ese momento, no estoy enojado con ese hombre que me penetró en mi noche de bodas (sí, me casé en Noche Buena). Todo error tiene un gran potencial para convertirse en un enorme aprendizaje. Y por eso le doy las gracias, porque ahora sé que si algún día me meten a la cárcel estoy preparado para lo que harán conmigo ahí. Y por eso no estoy enojado con él. No estoy enojado con un hombre que quiere aparentar ser mujer o con otro que quiera ser el corredor más femenino de la historia de Jamaica.



Porque a fin de cuentas cuando pienso en hombres que parecen mujeres o mujeres que esconden un pequeño pene entre sus piernas me acuerdo y sonrío, me acuerdo de elloas y siento que todo va a estar bien…todos menos uno.

No hay ejercito de trasvestis transexuales capaz de hacer que me cague de miedo tanto como esto. Imagen que no olvido desde 1993 y que hasta la fecha hace que de vez en cuando invierta un dinerito en el mercado negro y armas terroristas para que lo busquen y exploten con harta granada atorada atrás de las rodillas. Mis pesadillas tienen un dueño y señor:

El pinche niño/niña/enano/enana/gordo/gorda/down/anciano/diabético/velociraptor de Jurassic Park.



Cámbiale ma, cámbiale.


¿En qué chingadas madres estaba pensando Spielberg? “Quiero ser como Ron Howard que siempre mete a su hermano deforme en sus películas”.



“Sí, mete a un “humano” (¿se vale comillas dentro de comillas?) pequeño que parezca niño, que esté gordo, parezca niña, no muy alto porque yo no lo soy y creo si es semi enano me lleva a tener más rating con otro tipo de público. Que rete a nuestro personaje principal, luego éste lo amenace con una garra y listo, puedo hacer una película totalmente absurda de un parque temático de dinosaurios vivos en esta época porque después del shock de ver esto nadie se lo va a poder sacar de la cabeza y la trama será totalmente irrelevante. Ja, soy un genio, lo volví a lograr. Pero eso sí, ponle una gorra para malviajar más a la banda que desesperadamente intenta descifrar su género y a la vez para esconder sus cuernos” Porque Steven, tú y yo sabemos que ese coso no es de este mundo.

No mamen, qué bueno que no lo metió a La Lista de Schindler porque hubiera sido imposible ponerlo en blanco y negro de toda la maldad que sale de sus ojeras. Hubiera incendiado a la niña de vestido rojo sólo de verla. Es que en serio, me pongo a pensar en personajes de películas que me han hecho perder el sueño y dejar a mi novia durmiendo sola para agarrar el coche e irme a dormir con mi mamá:

- Eso el payaso.
- Los deformes de The HIlls Have Eyes.
- El Leprechan.
- El bebé de la película cuya portada es una carreola con una mano deforme que sale y título ignoro por completo.
- La mamá de Keanu Reeves en El Abogado del Diablo.
- Una caca con cara que vi una vez en Golden Choice.
- Gary Busey



Y sí, aunque son personajes e imágenes terribles, a fin de cuentas ninguno hace que me quiera matar metiéndome los audífonos por la nariz para intentar sacarlos por los ojos y así dormir tranquilo tanto como ese hijo de 17 mil putas de Jurassic Park.

Métete un palo Steven Spielberg, métete un palo.

1 comentario:

  1. Jajaja. Definitivamente Gary Busey. (Y la película de la carreola ¿no era Rosemary's baby?)

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